Si crees que tienes una fuga de agua en piscina, no te asustes, afortunadamente existen soluciones sin tener que hacer obra. Las fugas de agua en la piscina son bastante habituales, a veces las tuberías de la instalación se agrietan lo que produce una pérdida de agua muy pequeña aunque constante. Pero que sea algo habitual no significa que no tenga importancia, no hay que dejarlo pasar. Es un problema que se debe solucionar lo antes posible, ya que además del gasto innecesario de agua es posible que una pequeña fuga, de lugar a problemas de mayor envergadura.

Indicios de fuga de agua en piscina

El primer indicio es la perdida y consiguiente bajada de nivel del agua. En verano puede ser razonable una pérdida de agua de 2,5 a 3,5 cm. por semana y en invierno esa misma pérdida debería reducirse considerablemente, aunque es cierto que varía notablemente si la piscina se encuentra en una ubicación calurosa  o menos calurosa. Por lo tanto, si observas que la pérdida de agua es superior a estos valores, lo más probable es que tengas una fuga de agua en la piscina.

Si no estas seguro del todo, puedes probar con alguno de los métodos caseros como poner un trozo de cinta adhesiva a la altura del agua y si a la semana ves que ha descendido considerablemente, no hay duda.

Otro de los métodos más utilizado para detectar una fuga, es el método del cubo. Coloca un pequeño cubo lleno con agua en uno de los escalones y utiliza una piedra o ladrillo para mantenerlo estable. Marca el nivel del agua por dentro y por fuera de la cubeta (los niveles de agua tanto dentro del cubo como fuera serán los mismos). Revisa la marca después de un par de días, si el agua de fuera del cubo está por debajo de la marca exterior, es indicio de que existe una fuga.

Cómo solucionar una fuga agua en la piscina

Hoy en día existen múltiples soluciones más o menos fáciles de aplicar y de diverso coste, dependerá principalmente de la ubicación de la avería.

Aunque GSC no se encarga de reparaciones en el vaso de la piscina, sabemos que existen distintos productos selladores que se pueden aplicar incluso sin vaciar el agua, procediendo así a la impermeabilización del mismo. Por supuesto, y como siempre te recomendamos, es mejor que estos trabajos se realicen por empresas especializadas.

Pero si la avería se encuentra en la red de tuberías, GSC te ofrece la mejor solución, sin hacer obra.

Aunque cuando la fuga se encuentra en las tuberías, te puede parecer que el problema es algo mayor ¿verdad? ya que lo primero que pensamos es en proceder a su sustitución o a su reparación con las molestias que supone… Pero nada más lejos de la realidad, en la actualidad existe un método para rehabilitar las tuberías desde el interior sin realizar ningún tipo de obra: el sistema de encamisado con manga.

Solución sin obra

Lejos de las soluciones tradicionales existen nuevos sistemas tanto para localizar la fuga de agua como para solucionarla, sin hacer obra.

Una vez localizada la fuga, si se encuentra en el circuito de tuberías procedemos a su reparación sin obra con el sistema de encamisado con manga. Con este sistema evitamos cualquier apertura o rotura en la piscina. Además, si la tubería tiene acceso desde el exterior del vaso, no es necesario el vaciado de la piscina, pero si no tiene acceso no queda más remedio que vaciarla.

El proceso de rehabilitación y los materiales utilizados son los mismos que se aplican en la reparación de tuberías de saneamiento, aunque en un diámetro mucho más pequeño.

Dependiendo del diámetro de la tubería, podemos utilizar dos sistemas distintos de curado (endurecimiento) de la manga, con agua caliente o con luz UV LED. La única diferencia entre ambos es el tiempo de ejecución de los trabajos, que con el sistema LED es más rápido. En cuanto al resultado final, es idéntico.

La ejecución es bastante sencilla, utilizando un acceso existente introducimos una manga de fieltro impregnada de resina Epoxi. Una vez en el interior procedemos a su curado (endurecimiento) utilizando el sistema de agua caliente o de luz UV LED, según el sistema elegido para la rehabilitación. Esta fase de endurecimiento puede durar unas horas, en base al diámetro y longitud del tramo que estamos rehabilitando. Una vez finalizado el curado, hemos conseguido crear una nueva tubería dentro de la deteriorada, poniendo fin a la fuga de agua y sin realizar ningún tipo de obra.

fuga de agua en piscina

Manga en el interior del inversor

fuga de agua en piscina

Sistema de curado con agua caliente

 

En el caso de fugas pequeñas muy localizadas, podríamos aplicar el sistema de Packers con el que tan solo se rehabilita el tramo de tubería en el que se encuentra la fuga, evitando así la rehabilitación total. Si bien es cierto, en la mayoría de estas reparaciones lo aconsejable es proceder a la rehabilitación total para evitar problemas futuros.

Una fuga de agua en piscina, además de un problema para nuestra economía supone un posible daño para el  medio ambiente, no sólo por el coste neto del agua que se pierde, sino por los daños indirectos que dicha fuga pueden ocasionar con el paso del tiempo. No olvidemos que una fuga de agua supone una filtración continua y prolongada de agua que provoca el lavado del terreno, dando lugar a derrumbamientos. Y si esto se produce cerca de los cimientos de la vivienda, esta quedaría gravemente dañada en su estabilidad con el consiguiente peligro para sus habitantes.

Por eso es fundamental que, tanto para localizar como para reparar una fuga agua en la piscina, elijamos una empresa especializada en estos trabajos. Aunque esta recomendación parezca obvia, no siempre es así, y en más de una ocasión hemos tenido que solucionar los problemas que ha causado una empresa no especializada.

Haznos caso y asegúrate de a quién contratas para solucionar la fuga de agua en piscina.